Los peligrosos moluscos llamados dragones azules han vuelto a las playas de la costa alicantina, algo que no hacían desde el año 1705. Estos han sido localizados en las playas de Torrevieja, Orihuela y Guardamar del Segura.
Tal y como han publicado Juan Antonio Pujol o Raquel López Esclápez, en la revista “Mediterranean Marine Science“, este hallazgo se trata de algo “extraordinario“, ya que esta especie se encuentra en aguas más cálidas en los océanos Pacífico y Índico.
Por otra parte, han querido alertar a la población sobre los riesgos ante una picadura de este molusco. A pesar de su tamaño, apenas miden tres centímetros de longitud, se alimentan de las temibles carabelas portuguesas, una especie de medusa que causa el temor en los bañistas.
“Son capaces de concentrar en sus tejidos las células urticantes características de las especies que consume“, han publicado en la “Mediterranean Marine Science“.
Aunque solo atacan en caso de ser molestadas, su picadura puede originar una reacción urticaria muy grave en los humanos, y en algunos casos muy excepcionales, llegar a la muerte.
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