La instauración del censo genético canino tiene ventajas para todos los implicados además de ayudar a mantener las calles más limpias, salubres y con una mejor imagen por la ausencia de heces.
La huella de ADN serviría no solo para castigar a los infractores si no ayudaría a recuperar a las mascotas perdidas e impediría el abandono o la sustracción
Alejandro Martín, responsable del área de Programa Electoral del Comité Electoral de Sueña Torrevieja, indica que “ayuntamientos de varios municipios en España ya han probado este método y reportan una reducción de un 80% en las heces abandonadas en la vía pública apenas unos meses después de la entrada en vigor de la medida. Con esos datos todos ganamos”.
Alejandro Martin asegura que “Torrevieja será una ciudad más limpia y salubre, porque se acaba con el típico “todos los propietarios de perros son iguales” (ya que ahora sólo los que tengan comportamientos incívicos son “señalados” y sancionados) y porque en caso de pérdida o sustracción de sus mascotas, la huella de ADN de las mismas puede contribuir notablemente en su búsqueda”.
Además, Martín afirma que la creación del censo genético por ADN ayuda a “mejorar la convivencia y la imagen de tu ciudad siendo el complemento ideal del actual sistema de censado por microchip, al hacer que la identificación del animal sea siempre fiable al 100%”.
“También aumenta la limpieza de vías públicas al disponer de la huella genética de las mascotas de una localidad es posible compararlas con las heces abandonadas encontradas en la vía pública, pudiendo localizar al infractor”.
Y finalmente “controla el abandono de animales, ya que en muchos casos a las mascotas antes de abandonarlas los propietarios les arrancan el microchip para evitar que los localicen. Con el ADN aun quitándoles el microchip es posible identificar al incívico”
Pablo Samper, candidato a la alcaldía de Sueña Torrevieja, concluye afirmando que “el censo genético canino es una apuesta por el bienestar y contra el maltrato animal. Con este nuevo sistema lo propietarios no pueden abandonar a sus mascotas, porque por mucho que les arranquen el microchip, éstas podrán ser identificadas mediante el ADN. Además, las muestras de ADN también permiten seguir la huella, mediante filiación y parentesco, de los autores del abandono de camadas y crías aún no censadas, o del maltrato a estos animales”.
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